estilos de liderazgo
¿No sería genial poder utilizar el test DiSC para identificar a las personas con más potencial para ser líderes? ¿No crees que sería muy útil poder enfocarnos en encontrar a personas cuyos estilos de liderazgo sean más adecuados a liderar?
La mala noticia es que ir por el camino de elegir un estilo DiSC ideal para el liderazgo puede dar lugar a problemas. Porque un estilo determinado de personalidad no iguala a tener éxito.
Asumir que cierto estilo de personalidad tiene rasgos más positivos para el liderazgo no es una buena idea. Todos los estilos DISC pueden tener éxito en todos los roles ya que DISC no mide las habilidades, actitudes, conocimiento, valores o experiencias de las personas sino que solamente se enfoca en los comportamientos. Si tienes un posible líder con un comportamiento que prefieres pero la actitud no es la correcta puede ser que necesites seguir buscando.
Confiar solamente en el estilo natural de liderazgo puede llevarte a fallar porque no tendrás en cuenta las fortalezas y el crecimiento de las distintas personalidades así como tampoco quién es la persona en su totalidad.
Los líderes no tienen una personalidad determinada sino que cualquier categoría puede ser apta para liderar con éxito. Los líderes de éxito son los que tienen la habilidad de ajustar sus estilos para cumplir con las demandas de sus roles. La metodología DiSC es como un mapa que nos enseña cómo cada líder se comporta en diferentes situaciones y te ayuda a predecir cómo éstos tienden a hacer las cosas, liderar, tomar decisiones y comunicarse.
Imagínate que eres un líder que prefiere la cooperación y preguntar a su equipo sobre sus preferencias o sus opiniones pero en un momento determinado te encuentras de que tienes que tomar una decisión contraria al sentimiento general, una decisión que tú sabes que funcionará. Y aunque no tengas en cuenta las opiniones de los demás al tomar esa decisión, podrías comunicarle a tu equipo lo elegido y pedirles que confíen en ti.
Entre los líderes orientados a personas tenemos los líderes I y los líderes S, que son líderes que priorizan las relaciones sobre las tareas.
Los líderes I son sociables y tienden a apreciar la creatividad, la posibilidad y el entusiasmo sobre tareas y datos. Se enfocarán a liderar desde la relación y promocionan la competitividad mediante inspirar la visión y no tanto desde la autoridad. Puede sonar a comparación con otros perfiles.
Los líderes I tienden a ser entusiastas, animados, positivos, carismáticos y llenos de vida. Suelen ser optimistas y positivos, y no dudan en contagiar a todo el equipo. Tienden a tener una memoria selectiva, dejando de lado los fracasos y recordando más los éxitos. Muy sociables, se enfocan en crear redes de contactos y prefieren aprender de las experiencias antes que del análisis previo.
Los líderes de este estilo son líderes que guían, enseñan y desarrollan el potencial de sus seguidores. Se enfocan en la lealtad, el consenso, la confianza y la sinceridad por lo que es importante que compartan las metas a largo plazo con su equipo.
Destacan por crear entornos colaborativos donde las necesidades de los integrantes del equipo puedan ser satisfechas y todos sus miembros se apoyen constantemente. La escucha activa es una de sus fortalezas y son capaces de detectar y aprovechar el talento de los integrantes de su equipo.
Suelen estar muy abiertos a las ideas de otras personas y no dudan en mostrar aprecio a las contribuciones de los demás. Buscan mantener la armonía y la seguridad.
Los líderes IS son una combinación de los dos estilos I y S. Este tipo de líderes se sienten más cómodos con un estilo participativo de liderazgo y prefieren la cohesión de su equipo. No son jerárquicos y se centran en dar feedback positivo al equipo, evitando el negativo. Sus metas y responsabilidades son compartidas.
Destacan por construir entornos de apoyo con un ambiente positivo y colaborativos y reconocen las contribuciones de su equipo. De carácter fácil, alegre, cálido y sincero, es orientado a las relaciones personales y tienen necesidad de aceptación y afecto.
El estilo de personalidad D prefieren un estilo de liderazgo más autoritario. Prefieren un estilo basado en liderar a los seguidores, en hablar y que los demás escuchen. Priorizan la velocidad y la ejecución y toman riesgos.
Los líderes D son decisivos y directos y muestran sus fortalezas para generar confianza en los demás. Suelen ser ambiciosos y competitivos, con una clara orientación al logro. Altamente orientados a objetivos, tiene facilidad para superar obstáculos y conseguir las metas.
Los líderes C demandan a sus seguidores trabajo de alta calidad, seguir las reglas y cumplir. Este tipo de liderazgo se centra en implementar sistemas y se asegura que las expectativas queden claras. Los líderes C prefieren mantener la distancia y su modo preferido de comunicación es a través del email.
Suelen ser personas sistemáticas, cautelosas y analíticas. Dado que se preocupan mucho por la calidad, tienden a trabajar en un ritmo más moderado. Desean ser percibidos como expertos por lo que se sentirán atraídos por proyectos y roles con altos estándares de calidad. Son independientes y altamente disciplinados, sintiéndose inclinados hacia trabajos que requieren altos estándares de calidad.
Los líderes CD son una combinación de los dos estilos C y D. Este tipo de líderes prefieren una forma de liderazgo de autoridad y prefieren las organizaciones jerárquicas. Este tipo de líderes tienen poca tolerancia de los errores o cambios sin autorizar. Tienden a ser más formales y prefieren las estructuras y los métodos prácticos pero confiando en la información detallada. Se sienten motivados por tareas retadoras y con alto retorno de inversión.
Suelen ser desafiantes, decididos y racionales. Están enfocados a los resultados pero además estos tienen que ser de máxima calidad. No tienen miedo a desafiar el Estatus Quo y suelen ser equilibrados entre rapidez de pensamiento y capacidad de análisis. Tienen una alta capacidad de trabajo y lucha, llegando a afrontar de manera exitosa situaciones complicadas.
Los líderes DI son una combinación de dos estilos de liderazgo diferentes. Son líderes independientes y su liderazgo se enfoca en el cambio. Usan su carisma para persuadir a los demás para que les sigan. El estilo D pide acciones y resultados. Este tipo de líderes se ven como visionarios y pioneros porque tienen una visión clara de lo que quieren conseguir en el futuro. Son energéticos y se enfocan en liderar con el ejemplo.
Tienden a ser aventureros, dinámicos y con una visión optimista de la realidad además de una alta capacidad de comunicación. Usan la influencia para inspirar a los demás a unirse a sus metas y objetivos y son audaces y apasionados.
Este tipo de líderes son una combinación de los dos estilos de liderazgo reservados y tienen a ser más pensativos, actúan con cuidado y son colaborativos. Prefieren planear en detalle y son personas calmadas. Comunican sus expectativas pero esperan que las personas sigan las reglas (siendo éstas decididas en conjunto).
Tienden a ser modestos, cautelosos, imparciales, prácticos y precisos. Proporcionan resultados fiables a través de la estabilidad y consistencia y no tienen problemas en dejar que otros tomen la iniciativa.
Dentro de todos estos estilos los líderes que tienen éxito son aquellos que son tienen una alta conciencia de sí mismos y conocen su comportamiento. Ellos conocen sus fortalezas y las áreas dónde requieren trabajar.
El carisma, la lealtad y la integridad son cualidades necesarias de un líder pero estas cualidades no entran solamente en una categoría de personalidad.
En resumen, los mejores líderes son aquellos que, independientemente de su estilo natural, ajustan su comportamiento para encajar en el rol, las personas y las situaciones.
Y tú, ¿cuál es tu estilo de liderazgo?